Desayunamos en el hotel y a primera hora vendrán a recogernos para salir hacia las cascadas de Ouzoud.
Durante el trayecto podremos contemplar bellos paisajes de las montañas del Atlas, podremos divisar algunos pueblos bereberes donde parece haberse detenido el tiempo y cruzaremos las llanuras de Tadla.
Las cataratas de Ouzoud son uno de los lugares naturales más bellos del norte de África, este lugar es el salto de agua más elevado de Marruecos, con 110 metros de altura.
Tendremos la ocasión de adentrarnos en barca hasta las cascadas y poder verlas desde cerca.
Se encuentran en un lugar privilegiado, rodeadas de exuberante naturaleza, ríos y grandes desfiladeros. Las cascadas discurren por tierras arcillosas de color rojizo a las que el agua les da la vida con su constante fluir, y con los sonidos que nos regalará la naturaleza, se convertirán en toda una experiencia para los sentidos.
Este paisaje tan singular, es también conocido por sus monos de Berbería, un tipo de primate autóctono que vive en libertad en algunas zonas del país y que te requerirá la atención para que le des comida.
En este lugar será un privilegio poder comer con vistas a las cascadas o simplemente tomarse un té marroquí.
Por la tarde, volveremos a Marrakech para disfrutar de esta bonita ciudad y adentrarnos en los rincones típicos del lugar.